!Basta ya! Acabemos de una vez con la comedia.
El Barça, futbolísticamente a años luz del Madrid, debe liquidar la Liga ya. Tiene ante si la oportunidad perfecta. Todo el entorno merengue se prepara para una semana de presión, ignorando la Champions -esa competición en la que no pasan de octavos desde hace más de un lustro-, especulando con una goleada que suponga el 4º punto en juego, soñando con ver a los culés despeñándose a continuación en Londres y, ya puestos, frente al Villarreal.
Como no podemos contar con que otros equipos puntuen contra el Madrid, el Barça debe seguir su ritmo. Frente al Madrid basta con un empate, que dejaría a los blancos a 4 puntos más el goal-average a favor. Pero estoy harto de oir a los palmeros del madridismo, empeñados en ensalzar la raza, el orgullo, la casta y todos los apelativos casposos inseparablemente vinculados al Madrid.
El Barça, que asombra a toda Europa, que es admirado fuera de España, que es proclamado por especialistas internacionales como el modelo de futbol perfecto, que asusta incluso a los todopoderos de la Premiership, tiene que escuchar de la prensa capitalina todo tipo de desprecios, atribuyendo todo el mérito de su situación a las ayudas arbitrales -por cierto, tras perdonar a Higuain la 5ª tarjeta por una acción similar a la que no fue condonada a Alves, Pérez Burrull, el indeseable que birló dos penalties a Osasuna y expulsó burlonamente a Juanfran, también le ha perdonado la 5ª frente al Sevilla- o a la voluntaria exclusión del partido de sus rivales...
Por todo ello, el Barça debe -y lo mejor, puede- ganar en el Bernabeu. Sentando cátedra. Dejando a cada cual en su sitio. A diferencia de lo ocurrido en el Camp Nou, donde los merengues se dedicaron a pegar patadas hasta la extenuación, protegidos por la contemporización arbitral y la intensa lluvia, en el Bernabeu solo les vale la victoria y, si es posible, por más de 2 goles de ventaja. Ante esta situación, el Barça debe jugar con calma, moviendo la pelota en busca de los puntos débiles en la defensa del Madrid y, sobre todo, evitando caer en los momentos de locura a los que apela el equipo blanco cuando, a falta de recursos técnicos, lo fia todo a un ir y venir sin centrocampismo, pelotas al área y sálvese quien pueda. Si el Barça mantiene la cabeza fria, tiene medio partido ganado. El resto solo depende de la puntería... y del árbitro.
A la España mediática le interesa que la Liga siga viva (mientras en Alemania se considera que el Bayern no tiene opciones... por estar a 3 puntos del Wolsburg). Y los árbitros de las últimas jornadas parecen empeñados en que sea así -recordemos el escandaloso arbitraje sufrido por el Barça en Getafe-. Y el Comité de Competición, también. Tras indultar a Higuain y pasar por alto la antideportiva actitud del niñato Marcelo -¿contra quien ha empatado este imbécil?-, todo parece quedar compensado con una sanción -en la banda mínima- al descerebrado Pepe -30 millones € por un central cuyo principal recurso es la agresión, habitualmente obviado por los de negro-, para que ahora vengan los recursos, las apelaciones... y acabe en 5 partiditos de nada.
A lo que iba: Undiano Mallenco arbitrará el clásico. Árbitro del agrado del madridismo, como no. Aquel que en el infausto partido de hace dos años (3-3) fue diligente para expulsar -justamente- a Oleguer y señalar -justamente también- un penalty que avanzaba al Madrid, pero que obvió las continuas faltas que merecían la acumulación de tarjetas a, entre otros, Diarra, y pasó por alto un penalty de este a Ronaldinho en el minuto 90... que hubiese dado la victoria y, visto lo visto, la Liga al Barça. Entonces prefirió dar emoción a la Liga. Que el sábado no pretenda lo mismo...
Así pues, al Bernabeu, a ganar. Y al Chelsea, a pasarle por encima. Es importante, por el partido en si mismo, para evitar ir a Stamford Bridge con un resultado adverso, para evitar que los que miran la Champions por la tele lo aprovechen para anunciar que el Barça está en bache... y, de nuevo, por que el Barça es mejor. Que el Chelsea, que el Madrid, que el Manchester Utd., que el Arsenal o que el At. Bilbao. Ganaremos o no el triplete, pero lo merecemos más que nadie...
Y a los pericos, felicidades. Ya fuera de la promoción, es el momento de pedir a Sanchez Llibre que siga un par de temporadas más, subir el sueldo a Tamudo y Luis Garcia, no fichar a alguien que pueda cubrir al siempre-lesionado De a Peña y despedir cuanto antes a Nené e Ivan Alonso, no sea que hagan sombra a la mafia del vestuario. Grande Crackòvia!
domingo, 26 de abril de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)


No hay comentarios:
Publicar un comentario